La crisis económica, presente en las palabras del arzobispo de Santiago y la presidenta del Parlamento de Galicia durante la ofrenda al Apóstol
"Es necesario crear puntos luminosos de humanidad nueva, pero no vamos a encontrar los elementos necesarios para superar la crisis si no cambiamos en nuestro interior con una actitud de conversión", ha afirmado el arzobispo en la homilía pronunciada con motivo de la celebración de la Ofrenda al Apóstol, en la que la presidenta del Parlamento gallego, Pilar Rojo, ha actuado como delegada regia. En un discurso en el que ha hecho referencia a la visita del Papa a Santiago y a la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid, Julián Barrio ha recordado a las "personas más afectadas por la crisis" y las ha situado en el "horizonte moral para recuperar la confianza".
Julián Barrio ha tenido palabras de recuerdo para los que "han muerto por las consecuencias del terrorismo siempre irracional" y ha pedido por los gobernantes y por "todas aquellas personas que están ofreciendo sus mejores esfuerzos" para "responder a las exigencias del bien común y construir una sociedad mejor". Julián Barrio también ha encomendado al Apóstol a las familias gallegas, para que "con la colaboración necesaria" pongan "todo su empeño en la noble tarea de formar a las generaciones más jóvenes, animándolas a construir una sociedad donde se vivan los principios morales y espirituales que garanticen el respeto sagrado a la persona". "Hay que obedecer a Dios antes que ha los hombres", ha indicado monseñor Barrio, que, en el transcurso de la Homilía, ha pedido la bendición para el Rey y su familia y ha criticado la "cultura actual", en la que "la autonomía humana se ha convertido en el valor más decisivo, el progreso ha sustituido a la providencia y el papel de Dios, en gran parte, ha desaparecido de la conciencia".
El arzobispo ha replicado que "Dios nunca privará al hombre de su libertad", aunque "actuar con un fin contrario al bien de su naturaleza humana no es libertad verdadera, ya que la libertad de ordena hacia el bien". "Una ley civil que, rebasando los límites de su competencia, contradiga la verdad del hombre, no reconociendo sus derechos fundamentales o incluso atropellándolos, carece de fuerza obligatoria", ha sentenciado.
Monseñor Julián Barrio ha celebrado la Eucaristía central el en acto de la Ofrenda al Apóstol de este 2011, en el que ha participado como delegada regia -y por primera vez para ella-, la presidenta del Parlamento gallego, Pilar Rojo, que ha pedido la intercesión del Apóstol para "no claudicar en el empeño conjunto de acabar con la violencia contra las mujeres" y para que "el resurgir de la economía" venga acompañado "de un nuevo florecimiento de valores imperecederos" como la solidaridad y el respeto.
Así lo ha señalado durante su intervención en la Ofrenda del Apóstol que ha realizado este año en calidad de delegada regia y durante la cual ha recordado la celebración en 2011 del 800 aniversario de la Consagración de la Catedral, el Camino de Santiago y el desaparecido Códice Calixtino, del que ha deseado "profundamente su recuperación". Ha afirmado que Santiago ha sido "a lo largo de los siglos" lugar de peregrinaje para miles de personas, una tradición que "pervive", como evidencia la "inmensa afluencia de peregrinos y visitantes durante el pasado Año Xacobeo 2010" y la visita del Papa Benedicto XVI a Santiago.
La presidenta del Parlamento gallego ha tenido también un recuerdo para la difícil situación económica actual y, en concreto, ha pedido al Apóstol Santiago que "ilumine" a la sociedad para que "ese resurgir de la economía venga a acompañado de un nuevo florecimiento de valores imperecederos" como la honestidad o la solidaridad, "que parecen a veces desdibujados de entre las prioridades cotidianas". "Hoy vivimos inmersos en una grave crisis económica que tiene como principal consecuencia el desempleo que afecta a muchas familias", ha indicado Pilar Rojo, al tiempo que ha recordado que son "las mujeres y los jóvenes los que se ven más afectados por las dificultades causadas por la recesión más profunda de los últimos 50 años" que "causa desaliento e incertidumbre para una parte importante de los ciudadanos".
Pilar Rojo, que ha constituido la primera oferente mujer desde 2007, cuando lo fue la entonces presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, ha tenido también un recuerdo para las mujeres en su invocación al Apóstol a través de la lucha contra la violencia de género. En concreto, ha pedido al Apóstol "ánimo" para "no claudicar en el empeño conjunto" de acabar con la violencia de género, un "gravísimo mal" de la sociedad actual que "sobresalta y llena de pavor día tras día" a los ciudadanos. La delegada regia ha pedido al patrón de España que "ayude a la humanidad" a "eliminar los más graves problemas que se le presentan", como las guerras, la violencia en todas sus manifestaciones, el hambre, las "formas diversas de esclavitud moderna" y el terrorismo, "azotes particularmente dolorosos en la época" actual.
Pilar Rojo, que ha tenido palabras de recuerdo para el Rey en su primera Ofrenda como delegada regia, ha invocado al Apóstol para que "guíe a los gobernantes" para que "sean capaces de adoptar decisiones sabias y adecuadas a las necesidades del momento" en función del "bien común" "Que sepamos dar forma a normas ajustadas a las necesidades de la ciudadanía, que faciliten la convivencia y hagan más fácil el día a día, huyendo de trabas y dificultades", ha señalado Rojo, que ha pedido también que Santiago "oriente a las familias para que actúen siempre como germen de convivencia y de respeto".
Al acto religioso, que ha tenido lugar tras el pase de revista a las tropas en la Praza do Obradoiro, han acudido numerosas personalidades, como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo; el alcalde de Santiago, Gerardo Conde Roa -que vestía un traje de gala tradicional de la zona de Santiago que ha llamado la atención de los presentes-; el Fiscal Superior de Galicia, Carlos Varela; el Valedor do Pobo, Benigno López, y el presidente del Consello da Cultura Galega, Ramón Villares; entre otras personalidades sociales, políticas y militares. Tras el evento, que ha concluido sobre el mediodía, las autoridades presentes han acudido a una comida con motivo de la Solemnidad del Apóstol Santiago. La Ofrenda Nacional al Apóstol Santiago es una ceremonia que fue instituida en 1643 por Felipe IV y a lo largo de los años se mantuvo la tradición de que reyes, jefes de Estado o personalidades con las más altas responsabilidades invocaran al Patrón de las Españas los beneficios divinos para las tareas humanas.
Julián Barrio ha tenido palabras de recuerdo para los que "han muerto por las consecuencias del terrorismo siempre irracional" y ha pedido por los gobernantes y por "todas aquellas personas que están ofreciendo sus mejores esfuerzos" para "responder a las exigencias del bien común y construir una sociedad mejor". Julián Barrio también ha encomendado al Apóstol a las familias gallegas, para que "con la colaboración necesaria" pongan "todo su empeño en la noble tarea de formar a las generaciones más jóvenes, animándolas a construir una sociedad donde se vivan los principios morales y espirituales que garanticen el respeto sagrado a la persona". "Hay que obedecer a Dios antes que ha los hombres", ha indicado monseñor Barrio, que, en el transcurso de la Homilía, ha pedido la bendición para el Rey y su familia y ha criticado la "cultura actual", en la que "la autonomía humana se ha convertido en el valor más decisivo, el progreso ha sustituido a la providencia y el papel de Dios, en gran parte, ha desaparecido de la conciencia".
El arzobispo ha replicado que "Dios nunca privará al hombre de su libertad", aunque "actuar con un fin contrario al bien de su naturaleza humana no es libertad verdadera, ya que la libertad de ordena hacia el bien". "Una ley civil que, rebasando los límites de su competencia, contradiga la verdad del hombre, no reconociendo sus derechos fundamentales o incluso atropellándolos, carece de fuerza obligatoria", ha sentenciado.
Monseñor Julián Barrio ha celebrado la Eucaristía central el en acto de la Ofrenda al Apóstol de este 2011, en el que ha participado como delegada regia -y por primera vez para ella-, la presidenta del Parlamento gallego, Pilar Rojo, que ha pedido la intercesión del Apóstol para "no claudicar en el empeño conjunto de acabar con la violencia contra las mujeres" y para que "el resurgir de la economía" venga acompañado "de un nuevo florecimiento de valores imperecederos" como la solidaridad y el respeto.
Así lo ha señalado durante su intervención en la Ofrenda del Apóstol que ha realizado este año en calidad de delegada regia y durante la cual ha recordado la celebración en 2011 del 800 aniversario de la Consagración de la Catedral, el Camino de Santiago y el desaparecido Códice Calixtino, del que ha deseado "profundamente su recuperación". Ha afirmado que Santiago ha sido "a lo largo de los siglos" lugar de peregrinaje para miles de personas, una tradición que "pervive", como evidencia la "inmensa afluencia de peregrinos y visitantes durante el pasado Año Xacobeo 2010" y la visita del Papa Benedicto XVI a Santiago.
La presidenta del Parlamento gallego ha tenido también un recuerdo para la difícil situación económica actual y, en concreto, ha pedido al Apóstol Santiago que "ilumine" a la sociedad para que "ese resurgir de la economía venga a acompañado de un nuevo florecimiento de valores imperecederos" como la honestidad o la solidaridad, "que parecen a veces desdibujados de entre las prioridades cotidianas". "Hoy vivimos inmersos en una grave crisis económica que tiene como principal consecuencia el desempleo que afecta a muchas familias", ha indicado Pilar Rojo, al tiempo que ha recordado que son "las mujeres y los jóvenes los que se ven más afectados por las dificultades causadas por la recesión más profunda de los últimos 50 años" que "causa desaliento e incertidumbre para una parte importante de los ciudadanos".
Pilar Rojo, que ha constituido la primera oferente mujer desde 2007, cuando lo fue la entonces presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, ha tenido también un recuerdo para las mujeres en su invocación al Apóstol a través de la lucha contra la violencia de género. En concreto, ha pedido al Apóstol "ánimo" para "no claudicar en el empeño conjunto" de acabar con la violencia de género, un "gravísimo mal" de la sociedad actual que "sobresalta y llena de pavor día tras día" a los ciudadanos. La delegada regia ha pedido al patrón de España que "ayude a la humanidad" a "eliminar los más graves problemas que se le presentan", como las guerras, la violencia en todas sus manifestaciones, el hambre, las "formas diversas de esclavitud moderna" y el terrorismo, "azotes particularmente dolorosos en la época" actual.
Pilar Rojo, que ha tenido palabras de recuerdo para el Rey en su primera Ofrenda como delegada regia, ha invocado al Apóstol para que "guíe a los gobernantes" para que "sean capaces de adoptar decisiones sabias y adecuadas a las necesidades del momento" en función del "bien común" "Que sepamos dar forma a normas ajustadas a las necesidades de la ciudadanía, que faciliten la convivencia y hagan más fácil el día a día, huyendo de trabas y dificultades", ha señalado Rojo, que ha pedido también que Santiago "oriente a las familias para que actúen siempre como germen de convivencia y de respeto".
Al acto religioso, que ha tenido lugar tras el pase de revista a las tropas en la Praza do Obradoiro, han acudido numerosas personalidades, como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo; el alcalde de Santiago, Gerardo Conde Roa -que vestía un traje de gala tradicional de la zona de Santiago que ha llamado la atención de los presentes-; el Fiscal Superior de Galicia, Carlos Varela; el Valedor do Pobo, Benigno López, y el presidente del Consello da Cultura Galega, Ramón Villares; entre otras personalidades sociales, políticas y militares. Tras el evento, que ha concluido sobre el mediodía, las autoridades presentes han acudido a una comida con motivo de la Solemnidad del Apóstol Santiago. La Ofrenda Nacional al Apóstol Santiago es una ceremonia que fue instituida en 1643 por Felipe IV y a lo largo de los años se mantuvo la tradición de que reyes, jefes de Estado o personalidades con las más altas responsabilidades invocaran al Patrón de las Españas los beneficios divinos para las tareas humanas.
R.