El actor Martin Sheen rueda la película The Way en la Catedral de Santiago
El actor estadounidense de origen gallego Martin Sheen y su hijo, Emilio Estévez, director del film, calificaron de «milagro» la posibilidad ofrecida por la Iglesia de poder rodar en la catedral de Santiago de Compostela algunas escenas de la película The Way, que concluyen estos días en la capital gallega. «Es un milagro», confesó Sheen en una conferencia de prensa en la que apareció junto a su hijo y los demás actores de la película, que narra la historia de un oftalmólogo de California que viaja a Francia al enterarse de que su hijo falleció en un temporal en los Pirineos y descubre que pretendía emprender el Camino de Santiago, por lo que decide hacerlo por él llevando consigo sus cenizas.
El director atribuyó a un posible «malentendido» de «traducción» -ya que ni él ni su padre, de origen gallego, hablan castellano o gallego- los comentarios acerca de una supuesta modificación de algunas escenas consideradas obscenas por la Iglesia, como requisito para poder filmar en el interior de la catedral. «Una de las preocupaciones de la Iglesia es que no querían que fuese ofensiva», señaló Estévez, quien dijo que es consciente de que «nunca antes se había rodado una película dentro, y siempre fue el deseo de Martin penetrar en ella y grabar la misa del peregrino con el botafumeiro». En ese sentido, afirmó: «Nunca pensé que pudiéramos entrar en ella y el poder hacerlo cambia un poco las cosas. Uno sabe que al entrar le pone de rodillas y eso es lo que ocurre en la película con los peregrinos».
El director de la productora cinematográfica Filmax, el gallego Julio Fernández, que participa en la película, aseguró que Sheen «lloró» al enterarse de que le habían concedido el permiso para filmar en el interior de la catedral. Estévez señaló que los cuatro personajes -interpretados por la actriz canadiense Deborah Kara Unger, y los actores holandés Yorick Van Wageningen y el norirlandés James Nesbitt, además de Sheen- aparecen «inspirados y conmovidos» por la experiencia, dijo. «El camino es un viaje espiritual interno para cualquiera, ya sean católicos o no. De hecho hemos encontrado en las últimas seis semana en el camino a una mayoría de no católicos y no creyentes», comentó Sheen, quien mostró se deseo de repetir ese recorrido más adelantes «aunque necesite tres meses».
Su hijo indicó que han concurrido una serie de «milagros» que han permitido hacer la película, y señaló que, una vez concluida la grabación, en un par de semanas espera regresar a Estados Unidos para proceder a su montaje, y expresó su deseo de presentarla en mayo próximo en algunos de los festivales internacionales de cine europeos entre los que mencionó Cannes, Venecia o San Sebastián. Añadió que posteriormente estaría orgulloso de proyectarla el próximo verano al aire libre en Santiago de Compostela, coincidiendo con la celebración del Año Xacobeo.
Señaló que es la tercera vez que trabaja como director de cine con su padre, al que consideró su «actor favorito, una fuente de inspiración y un buen colaborador».
El actor de origen estadounidense recordó en la conferencia de prensa con gran sentido del humor que su padre nació en la localidad pontevedresa de Tui el 2 julio 1898 y «como los historiadores recordaran, es el día en que Estados Unidos declaró la guerra a España». Subrayó que, como originario de padre gallego y madre irlandesa, aprendió a «amar su herencia» multicultural y subrayó que como en Estados Unidos hay movimientos anti-inmigrantes «es necesario recordar a los estadounidenses que es una nación de inmigrantes y que lo mejor de nosotros viene de otras partes». Añadió que esta es la primera vez que trabaja en España y que el guión está escrito por su hijo, que es también el director, lo que constituye «una ocasión extraordinaria» en su vida, su carrera y su familia. «Es la mejor ocasión de hacerlo en el país de mi padre con el guión y dirección de mi hijo y en esta extraordinaria compañía. Le doy gracias a Dios por todo ello», concluyó.
El director atribuyó a un posible «malentendido» de «traducción» -ya que ni él ni su padre, de origen gallego, hablan castellano o gallego- los comentarios acerca de una supuesta modificación de algunas escenas consideradas obscenas por la Iglesia, como requisito para poder filmar en el interior de la catedral. «Una de las preocupaciones de la Iglesia es que no querían que fuese ofensiva», señaló Estévez, quien dijo que es consciente de que «nunca antes se había rodado una película dentro, y siempre fue el deseo de Martin penetrar en ella y grabar la misa del peregrino con el botafumeiro». En ese sentido, afirmó: «Nunca pensé que pudiéramos entrar en ella y el poder hacerlo cambia un poco las cosas. Uno sabe que al entrar le pone de rodillas y eso es lo que ocurre en la película con los peregrinos».
El director de la productora cinematográfica Filmax, el gallego Julio Fernández, que participa en la película, aseguró que Sheen «lloró» al enterarse de que le habían concedido el permiso para filmar en el interior de la catedral. Estévez señaló que los cuatro personajes -interpretados por la actriz canadiense Deborah Kara Unger, y los actores holandés Yorick Van Wageningen y el norirlandés James Nesbitt, además de Sheen- aparecen «inspirados y conmovidos» por la experiencia, dijo. «El camino es un viaje espiritual interno para cualquiera, ya sean católicos o no. De hecho hemos encontrado en las últimas seis semana en el camino a una mayoría de no católicos y no creyentes», comentó Sheen, quien mostró se deseo de repetir ese recorrido más adelantes «aunque necesite tres meses».
Su hijo indicó que han concurrido una serie de «milagros» que han permitido hacer la película, y señaló que, una vez concluida la grabación, en un par de semanas espera regresar a Estados Unidos para proceder a su montaje, y expresó su deseo de presentarla en mayo próximo en algunos de los festivales internacionales de cine europeos entre los que mencionó Cannes, Venecia o San Sebastián. Añadió que posteriormente estaría orgulloso de proyectarla el próximo verano al aire libre en Santiago de Compostela, coincidiendo con la celebración del Año Xacobeo.
Señaló que es la tercera vez que trabaja como director de cine con su padre, al que consideró su «actor favorito, una fuente de inspiración y un buen colaborador».
El actor de origen estadounidense recordó en la conferencia de prensa con gran sentido del humor que su padre nació en la localidad pontevedresa de Tui el 2 julio 1898 y «como los historiadores recordaran, es el día en que Estados Unidos declaró la guerra a España». Subrayó que, como originario de padre gallego y madre irlandesa, aprendió a «amar su herencia» multicultural y subrayó que como en Estados Unidos hay movimientos anti-inmigrantes «es necesario recordar a los estadounidenses que es una nación de inmigrantes y que lo mejor de nosotros viene de otras partes». Añadió que esta es la primera vez que trabaja en España y que el guión está escrito por su hijo, que es también el director, lo que constituye «una ocasión extraordinaria» en su vida, su carrera y su familia. «Es la mejor ocasión de hacerlo en el país de mi padre con el guión y dirección de mi hijo y en esta extraordinaria compañía. Le doy gracias a Dios por todo ello», concluyó.
R.